miércoles, 9 de julio de 2008

Constitución del Sujeto Histórico-Memoria Crítica

República Bolivariana de Venezuela
Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez
Maestría en Educación Robinsoniana Curso: Visión Emergente de la Educación en el Ámbito Socio Político Contemporáneo








MEMORIA CRÍTICA SOBRE CONSTITUCIÓN DEL SUJETO HISTÓRICO







INTEGRANTES DEL GRUPO 1B:
JUAN FIGUEROA, YUMEN ZEIN Y YANETT MARCANO








BARCELONA, JUNIO DE 2008

CONSTITUCIÓN DEL SUJETO HISTÓRICO
“Sin un cambio en nuestras pautas de pensamiento, no seremos capaces de resolver los problemas que hemos creado con nuestras actuales pautas de pensamiento.” ALBERT EISTEIN

PROCESOS DE TRANSFORMACIÓN SOCIAL QUE SE VIENE DANDO EN LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Y LATINOAMÉRICA

En los actuales momentos, se viene dando en la República Bolivariana de Venezuela un proceso revolucionario pacífico que tiene como fundamental propósito hacer realidad el sueño de nuestro Libertador: Alcanzar la Suprema Felicidad para los ciudadanos y ciudadanas y cristalizar la integración de los pueblos americanos. De manera que mediante diferentes políticas, el Estado procura la consolidación de una sociedad más incluyente en todos los ámbitos: económico, social y educativo. Es en ese sentido, cómo se están dando, cada vez más, procesos profundos de transformación que contribuyen con la construcción del PODER POPULAR y por ello se han delineado las LÍNEAS GENERALES DEL PLAN DE DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL DE LA NACIÓN 2007-2013, para darle continuidad al proceso de cambio iniciado desde 1999 y profundizar, con ello, los logros alcanzados por los Lineamientos del Plan de Desarrollo Económico y Social 2001-2007. Bajo estas Líneas se pretende orientar a Venezuela hacia la Construcción del Socialismo del Siglo XXI, mediante las siguientes directrices: Nueva Ética Socialista, La Suprema Felicidad Social, Democracia Protagónica y Revolucionaria, Modelo Productivo Socialista, Nueva Geopolítica Nacional, Venezuela: Potencia Energética Mundial y Nueva Geopolítica Internacional. Se quiere, entonces, continuar avanzando en todas las esferas sociales que permitan una mayor organización socio-política y el acceso de las grandes mayorías a la educación, la salud, a mejores condiciones de habitabilidad, a la alimentación, y en el plano internacional, a una mayor consolidación de políticas integracionistas como el Alba, El Banco del Sur, La Misión Milagros, Petrocaribe, entre otros, para favorecer la unión americana y erradicar los mecanismos de dependencia imperial.

Sin dudas, es la Educación el principal motor del proceso de cambio que se viene desarrollando en el país, de ahí los importantes avances que en esta materia se han dado, desde la llegada del actual presidente, Hugo Chávez, debido a la implementación de planes y programas para brindar una educación de calidad e inclusiva, y de esta forma dar total cumplimiento a lo establecido en la Constitución Bolivariana, concretamente en el Art. 102, en el cual se establece que: “La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como función indeclinable y de máximo interés en todos los niveles y modalidades, y como instrumento de conocimiento científico, humanístico y tecnológico al servicio de la sociedad. La educación es un servicio público y está fundamentada en el respeto a todas las corrientes del pensamiento, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo del ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad en una sociedad democrática basada en la valoración ética del trabajo y en la participación activa, consciente y solidaria en los procesos de transformación social consustanciados con los valores de la identidad nacional, y con una visión latinoamericana y universal…” Esta propuesta enfatiza y respalda los planes ejecutados por el Gobierno Bolivariano, para brindar oportunidades de estudios a todas y todos los venezolanos(as), por ello no podemos dejar de señalar los grandes logros obtenidos en esta materia, a continuación se mencionan algunos de ellos: el día 28 de octubre de 2005 , Venezuela fue declarada “Territorio Libre de Analfabetismo” por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura(UNESCO) y el Convenio Educativo Andrés Bello, gracias al apoyo dado por el Gobierno Cubano para la implantación del Método Alfabético “Yo Sí Puedo”, adaptado a la realidad del entorno venezolano, para luego dar formalmente inicio, Vía Decreto Presidencial, al Plan Extraordinario de Alfabetización “Simón Rodríguez” conocido como Misión Robinson; asimismo, se implementó la Educación Gratuita en todos los niveles para dar cumplimiento al Art. 103, eliminando el cobro de matrícula e incluyendo becas para los más necesitados(as). Se inició y se continúa desarrollando la conversión de más de 3.000 planteles en Escuelas Bolivarianas, para la formación integral, mediante la doble jornada, y la implantación del Programa de Alimentación. (PAE). Otro de los logros, lo constituye la Recuperación y ampliación de las Escuelas Técnicas Industriales y Agrícolas; el incremento de la matrícula estudiantil en la Educación Básica; se crea, además, la Universidad Bolivariana de Venezuela y la implementación del plan de Becas por la Fundación Gran Mariscal Ayacucho; también se procura la masificación de las Nuevas Tecnologías de Información , mediante la creación de sitios de accesos públicos para uso de Internet, algunos de ellos los Infocentros, Cibercafés, Cbits, Bibliotecas Virtuales. Se produce, además, la implantación de la Misión Ribas, para facilitar la culminación del bachillerato de miles de compatriotas, por diversas razones excluidos durante años. Se crea la Misión Sucre para encauzar la municipalización de la educación universitaria y el desarrollo de aldeas universitarias. Y se produce la eliminación de políticas restrictivas para el ingreso de jóvenes a las universidades públicas del país, como la presentación de la prueba de aptitud académica y pruebas internas y la recién anunciada creación de 14 nuevas Universidades Públicas Nacionales.

La implementación de Políticas acertadas por parte del estado venezolano ha incrementado el acceso de venezolanos(as) hacia una verdadera educación gratuita y de calidad, lo cual constituye pasos significativos, con respecto a la labor emprendida para alcanzar el desarrollo integral de un mayor número de venezolanos(as) y el bienestar colectivo, en plena correspondencia con lo demandado en el Art. 103 de nuestra Constitución. Paralelamente, se vienen también dando cambios significativos en varios pueblos latinoamericanos, mediante la acción liberadora de relevantes Movimientos Sociales como el de Los Sin Tierra en Brasil y el Movimiento Zapatista en México. Surgen, entonces, nuevos/as Protagonistas del cambio social, cuya Visión fundamental es lograr un mayor bienestar colectivo, mediante la formación ideológica de los pueblos para lograr la equidad social y mejores condiciones de vida. De allí la importancia de realizar una evaluación de estas enriquecedoras experiencias, por constituirse en modelos emergentes para la construcción de nuevas experiencias de aprendizaje colectivo y participación ciudadana para la solución de los problemas comunitarios.


PROTAGONISTAS DEL CAMBIO SOCIAL Y ENFRENTAR EL DESAFÍO
En los últimos años, los Movimientos Sociales han venido logrando importantes reinvidicaciones sociales, a través de la organización del colectivo y fundamentalmente, mediante el fomento, entre sus miembros, de valores socialistas como la solidaridad, el trabajo colectivo, la justicia social, la corresponsabilidad, el respeto y el bien común. Sin dudas, estas prácticas han favorecido, necesariamente, la implementación de nuevas experiencias de aprendizajes, desde la comunidad y desde lo que comúnmente se ha denominado la educación informal.
Pero intentemos hacer un abordaje o aproximación ontológica de estos Movimientos Sociales. Al respecto, y considerando lo expresado por Zibechi R.(2004), con relación a que el movimiento social está en la sociedad misma, vale al respecto traer a colación la importante experiencia que se está dando en la sociedad venezolana con la participación corresponsable de ciudadanos(as), organizados en Consejos Comunales, con el propósito de alcanzar mejores condiciones de vida. Se conocen, así, interesantes avances colectivos en comunidades, con la participación de compatriotas quienes, constituidos en Consejos Comunales y conformando diferentes comités (salud, educación, vivienda, ambiente), presentan, ante el ejecutivo, proyectos de envergadura cristalizados en conformación de cooperativas, constitución de bancos comunales y aprobación de presupuestos para la ejecución de obras.
De esta manera, puede decirse que la actuación de los Consejos Comunales procura brindar los espacios para el desarrollo individual, colectivo y por ende de la sociedad. Otros Movimientos Sociales, ya mencionados, son el Zapatista (México), los Piqueteros (Argentina), Los Sin Tierra (Brasil) y el Movimiento Indígena en Ecuador. El Ser de estos Movimientos, su Identidad, rebasa los límites del individualismo y se centra en la búsqueda del bienestar de todos(as), es, decir, de la comunidad, del colectivo, sin suprimir, por supuesto, los intereses personales, por ello es tan importante en la conformación de la identidad se fomenten, como valores, la solidaridad y la cooperación. Otro de los aspectos señalados por Doise, W (1991), sobre estas corrientes, es la búsqueda de integración de acciones como la autoorganización y la lucha y denuncia cotidiana. En el caso concreto de la República Bolivariana de Venezuela, el Estado se propone el empoderamiento del pueblo, el poder en manos de todos(as), mediante la organización en Consejos Comunales. Surgen paradigmas de organización social, basadas en la cooperación y en el empleo de modelos emergentes educativos; puede mencionarse, cómo, además, la política de desarrollo integral, brindada por el Estado a los venezolanos(as) busca que las formas de participación ciudadana incluyan, además, darle continuación a la formación académica, mediante la participación en las diferentes misiones (Robinson, Ribas, Sucre). Pero también, desde la práctica comunitaria se construyen experiencias de aprendizajes, con la participación de los miembros de la comunidad, quienes pueden expresar sin temores, sus emociones, conocimientos, expectativas y criterios para el desarrollo social de su entorno.
La presencia del Comité de Educación, brinda interesantes alternativas a la comunidad, porque parte de un diagnóstico comunitario que debe incluir las necesidades formativas e intereses de los miembros; por ejemplo pueden abordarse temas dirigidos a los jóvenes como el embarazo en adolescente, las infecciones de transmisión sexual y abusos y pornografía infantil y adolescentes. Lo importante es lograr el alcance de la máxima felicidad posible y este tipo de formación, desde la base comunitaria, busca ayudar en la construcción de un proyecto de vida funcional. Otros temas pueden referirse a la formación ideológica y al conocimiento sobre las amenazas contra la economía, la soberanía alimentaria y los logros alcanzados por la Revolución Bolivariana. Estamos sin duda, ante la construcción del Sujeto Histórico.
Con los Consejos Comunales, se señala la importancia de la participación de todas(os) en la toma de decisiones, con esto se favorece no sólo la participación protagónica sino que se afianza la corresponsabilidad, por lo que el liderazgo es colectivo. Todos(as) trabajan por la concreción de los proyectos y es así cómo se han logrado ejecutar programas habitacionales, creación de cooperativas, canchas deportivas, módulos de salud y/o equipamientos médicos, se han mejorado condiciones de salubridad (agua, luz, gas directo, entre otros). Dado que el poder está en el pueblo, también se abordan los valores, que motorizan el accionar cotidiano de los miembros de las comunidades, y les permite enfrentar los retos y apoyarse ante situaciones adversas. Se involucran sentimientos, necesidades, expectativas sociales, y se ponen en práctica nuevos paradigmas educativos, pero bajo la conducción del lenguaje de los movimientos sociales.
Pero, también conviene traer a colación la experiencia de otros Movimientos Sociales como el de Los Sin Tierra (Brasil), debe decirse que en la organización colectiva de este movimiento, se observan propuestas educativas interesantes; por ejemplo, para los brasileros la solidaridad y la identidad del colectivo, constituyen dos estrategias básicas para la organización social, por lo que se fomentan valores como la participación en colectivo, la autocrítica y la disciplina.

Tal como lo plantea, Ferrari, el problema de la falta de Tierras predomina en Latinoamérica, por lo que en la República Bolivariana de Venezuela sigue vigente, aún, la situación de los Latifundios (grandes extensiones de tierra en pocas manos), no obstante, el Estado venezolano con la Ley de Tierra, continúa recuperando aquellas extensiones de tierra, de dudosa procedencia o por largo tiempo inutilizadas. En Bolivia, alrededor de 4 millones de bolivianos carecen de una parcela mínima debido a injustas distribuciones de tierras realizadas por los corruptos y oligárgicos gobiernos de turnos, por ello los Movimientos de campesinos y sectores empobrecidos del país coinciden con el Movimiento de los Sin Tierra en Brasil para lograr la recuperación de las tierras para las familias desposeídas y lograr con ello una mayor justicia social.

El Movimiento de los Sin Tierra lleva 17 años de fundado e involucra la participación de los campesinos y de las comunidades de base, defienden derechos de libertad e igualdad y están en contra del modo de utilización de los recursos y modelos culturales También aspiran la democratización de las tierras y de los medios de comunicación. Su lucha se centra en la reforma agraria, con profundos cambios en lo social, económico y político, por lo que se plantea como una lucha de todos e implementa la ocupación (campamentos) y organización de la producción (asentamientos), con el propósito de mejorar la calidad de vida de los campesinos. Aunque tienen una propuesta concreta de ocupamiento de la tierra, aspiran lograr un verdadero cambio que apunte a todas las direcciones de la sociedad. De hecho algunos autores han categorizado los trabajos de este movimiento como "laboratorios sociales", la lucha masiva se extiende, entonces más allá del logro del abastecimiento, mediante los asentamientos, se incorpora nuevas formas de organización cooperativa que incluye la educación, la actividad cultural, la obtención de finanzas y de recursos, mediante la permanente movilización y concienciación de los integrantes del movimiento.

Resulta interesante subrayar cómo estas experiencias de organización están ampliamente abanderadas por dos aspectos fundamentales para garantizar el accionar colectivo son estos el SENTIMIENTO y la CONCIENCIA. La
PEDAGOGÍA DEL SENTIMIENTO entonces, plantea la implementación, también de un cambio social, iniciado desde la persona, desde su esencia, desde el fomento de estima personal que conlleve a los socios(as) del aprendizaje a un descubrimiento de las potencialidades personales para consolidarlas y luego agregarlas al trabajo colectivo para potenciar el sentido de pertinencia social. Es precisamente ese sentimiento hacia las tierras, hacia las comunidades, hacia la igualdad social, lo que lleva a movimientos sociales, como el de Brasil, a procurar los cambios y transformaciones sociales que se están dando. Por ello, en nuestro caso concreto, se requiere también se incorpore una pedagogía distinta, basada en los sentimientos, en la exaltación de valores trascendentales como la solidaridad, el respeto, la convivencia social, la libertad y la justicia. Desde actividades cotidianas y comunitarias, puede, entonces, iniciarse el verdadero cambio, el cual necesariamente, debe considerar la dignidad humana del socio que aprende, sus experiencias, su entorno, su mundo personal y familiar, su comunidad.

La experiencia de los pueblos permite evaluar modos de intervención social, considerando el aprendizaje permanente, desde la cotidianidad, de quienes integran los Movimientos Sociales; se parte de la premisa de que sólo la organización y la conciencia social, pueden acelerar los cambios y la satisfacción de las demandas para alcanzar el bienestar colectivo. Existe, pues, una total conexión entre estas vivencias sociales y la visión emergente de la educación. La manera cómo en los Movimientos se procura la toma de conciencia social de sus miembros ante las situaciones de injusticia es una de las fortalezas, porque es esta toma de conciencia la que impulsa las luchas, en la búsqueda de una mejor calidad de vida. Asimismo, estas prácticas educativas, promueven que desde la base de las comunidades se combata el individualismo y favorezcan la práctica de la solidaridad y el bien común. Se fomenta el debate, la discusión y la confrontación de ideas sobre temas que van más allá de lo comunitario y que tiene que ver con la visión holística del mundo, del capitalismo salvaje y el neoliberalismo, de esta manera procuran mediante la formación ideológica, asumir actitudes críticas sobre las políticas provenientes del imperio y de países desarrollados. Y mantenerse en pie de lucha contra la inequidad y las injusticias sociales. Puede, entonces, concluirse con propiedad, que los Movimientos Sociales, sus luchas, la forma de participación, sus logros, se constituyen en ejemplos de la nueva lucha emprendida por los pueblos para la obtención de mejores formas de vida. Pero también de sus experiencias sociales se pueden extraer modelos de aprendizajes, basados en el fomento de los valores y en formas de participación como la organización y el trabajo cooperativo. Y la formación de la conciencia social de quienes luchan por ideales humanistas, porque se corrobora que otro mundo sí es posible.

HORIZONTE SOCIAL A VISLUMBRAR


En el caso de la República Bolivariana de Venezuela y por supuesto de los demás países que conforman Latinoamérica se vislumbra un Horizonte Social en el cual se consolide una mayor participación ciudadana para, en colectivo, alcanzar una mayor felicidad social. Precisamente, y buscando una plena correspondencia con el pensamiento y la acción del Libertador, se requiere que todos(as) los actores sociales(educadores, alumnos(as), miembros de la comunidad, gobernantes, comunicadores de medios de comunicación social y medios alternativos, entre otros) adquieran un mayor compromiso en la ejecución de su rol, para entre todos(as) construir una estructura social incluyente y un modelo social humanista y endógeno, para propiciar la igualdad de condiciones y la consolidación del bienestar colectivo.

En ese sentido, la visión emergente de modelos educativos, se constituyen en alternativas para la constitución de un sujeto pedagógico corresponsable de la construcción del modelo de país plasmado en la Constitución Bolivariana. Es por ello que la Educación debe ser liberadora, una Educación que se pueda propiciar desde los diferentes espacios, formales e informales, y en el que puedan participar, a través del compartimiento de saberes y experiencias, en la construcción de un nuevo orden socia. Desde los Consejos Comunales, desde los Movimientos Sociales, se pueden tomar métodos de participación ciudadana para que se consolide la seguridad social.

El horizonte social demanda, además, la construcción de una Nueva Ética Socialista para lograr la refundación de la Nación, mediante la puesta en práctica de valores y principios como la solidaridad, la honestidad, el respeto, la equidad social, el amor, la práctica del bien común y el cultivo de la conciencia social. Estas nuevas prácticas educativas, fundamentadas en los valores y el ejercicio de la democracia protagónica y participativa son las que pueden garantizar se alcance la Suprema Felicidad de los pueblos, traducido en la superación de la pobreza y la exclusión social, consolidando las políticas de salud integral y la soberanía alimentaria y promoviendo una mayor identidad nacional, latinoamericana y caribeña.

Resulta importante para que se logre el proceso de identidad, se fomente desde la escuela y en todos los espacios de participación una mayor conciencia social, y para esto es necesario se brinde la información sobre las amenazas que cierne sobre países progresistas como Venezuela, Argentina, Ecuador, Bolivia, entre otros, por parte de países imperialistas que no se resisten a perder las riquezas naturales de estos pueblos, los cuales con dignidad y por sus altos niveles de organización están prestos para la defensa de la soberanía. Ya ha sucedido con la República Bolivariana de Venezuela, cuyo gobierno, legítimamente electo, ha enfrentado situaciones desestabilizadoras como Golpes de Estado, sabotaje petrolero, desabastecimiento de alimentos provocados por la empresa privada, guarimbas, entre otros. Realidad parecida, en cuanto a la inestabilidad se está dando en países como Argentina, con el paro desestabilizados de medianos y grandes productores agrícola; en Bolivia con los intentos separatistas liderados por bolivianos oligarcas y enceguecidos racistas; y las acusaciones y atentados en cuanto a la violación del espacio territorial sufrido por el hermano país de Ecuador, por parte de Colombia. Todas esta manifestaciones de desestabilización, sin embargo, mantienen en pie de lucha a los movimientos sociales y latinoamericanos cada vez más consciente de luchar por la defensa de su patria y por unión de los pueblos, sólo así se garantizará la sobrevivencia de los pueblos de América y el futuro de las generaciones venideras. Sin dudas, hoy más que nunca nuevos paradigmas educativos, desde la base de las comunidades y con la emergencia de la Pedagogía del Sentimiento, y apoyo de las demás instituciones sociales, tienen un importante reto que enfrentar: la defensa de la soberanía de los pueblos y el logro de la equidad social para la obtención de la Suprema Felicidad Social, porque Otro Mundo Sí es Posible.



LO FORMATIVO QUE HAY QUE ABORDAR

Sobre la base de la concepción de Simón Rodríguez acerca de la educación, enfocada como un proceso colectivo e integrador, y considerando su visión sobre la sociedad, como una gran escuela formadora de ciudadanos y ciudadanas, se debe precisar que la Educación es un proceso político y socializador que se genera de las relaciones entre escuela, la familia y la comunidad por lo que conlleva al desarrollo de conocimientos, valores, actitudes, virtudes, sentimientos, habilidades y otros. Esto, crea la necesidad de formar ciudadan@s con conciencia social, comprometidos con el desarrollo de un ser social vinculado con su entorno, conciencia signada por la cooperación, la solidaridad, la reflexión, la crítica, la autocrítica, el diálogo y el trabajo voluntario, máxima expresión de la conciencia social.

La formación educativa debe estar ligada a los procesos de socialización, todo lo que vivenciamos es fuente de aprendizaje y todo lo que aprendemos es alimento para el desarrollo de la personalidad y de la subjetividad si se involucra en el proceso de la reflexión, la interpretación “garantizando aprendizajes comprensivos, relacionados y globalizados con significación personal y social, de modo que sean efectivos en situaciones nuevas y les posibilite seguir aprendiendo ante las crecientes y múltiples oportunidades de aprendizaje” (Inostroza, 1998). La reflexión, sin embargo, nos dice Maturana (1996) es un arte que debe aprenderse y para aprenderse debe vivirse, por ello cuando se habla de darse forma implica no solo el proceso individual, el cual es fundamental, sino también un proceso de socialización que define la existencia. De allí que la formación del individuo es el resultado de múltiples factores que gracias a la participación activa del sujeto pedagógico da cabida a la educación como mediadora del proceso de desarrollo del pensamiento y la personalidad.

En el contexto de la Educación Bolivariana y enfocado en el paradigma emergente educativo, nuestro sujeto pedagógico debe tener una formación integral, humanista, consustanciada con los principios y valores consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y en los Derechos Universales del Hombre y el Ciudadano(a), conocedor(a) de sus raíces históricas, culturales y sociales que valore la Identidad Nacional, para así convertirse en un ser que, a partir de su realidad local, regional y nacional, trascienda, incluso nuestras fronteras, para la construcción de la patria grande latinoamericana.


CÓMO HEMOS DE CARACTERIZAR LO FORMATIVO CON POTENCIALIDAD TRANSFORMADORA

La Educación constituye un proceso simultáneo de construcción de nuevos saberes y desarrollo humano, lo que exige en el mundo contemporáneo una práctica pedagógica más dinámica, interactiva y participativa, donde sea el mismo sujeto pedagógico quien intervenga activamente para buscar y construir sus propios conocimientos. Hoy sin embargo, existe una profunda necesidad de que la práctica pedagógica se transforme realmente, comenzando por sensibilizar a los actores principales, quienes deben de sacudirse de la pasividad y conformismo en su quehacer educativo, si queremos pretender alcanzar las propuestas de cambios planteados en el Diseño Curricular Bolivariano. Por otro lado, también deben darse los espacios para la construcción y el intercambio de saberes, basado en la visión del colectivo y bajo los principios de los valores trascendentales. De esta manera, se procura una mayor correspondencia de la praxis educativa y las profundas transformaciones sociales que se están dando en el país y en Latinoamérica.

Con la concepción del paradigma emergente educativo, el docente debe desarrollar una pedagogía activa, basada en el diálogo, la vinculación teórica-práctica y la diversidad de trabajo en equipo. Esta metodología a su vez es percibida por los alumnos, quienes cuentan ahora cuentan con un amigo(a), el maestro(a) y un nuevo modelo, alguien que les escucha y les ayuda a desarrollarse. Es indispensable impartir una educación por medio de recursos tecnológicos, científicos y culturales, con el fin de generar en el educando cambios positivos en su proceso de aprender, desaprender y reaprender; promover el desarrollo del pensamiento del educando, favoreciéndolo a través de la vinculación con sus sentimientos, valores, afectos, actitudes que despierten el espíritu creativo e investigación del mismo, para ampliar sus horizontes educativos, acorde al nuevo orden mundial.

CÓMO LO FORMATIVO NOS LLEVA A CAMBIAR LA SOCIEDAD Y A LOGRAR LA TRANSFORMACIÓN

Para los grandes cambios políticos, sociales, económicos, culturales y otros, que se comienzan a producir en Venezuela, es rigurosamente cierto que la Educación debe orientarse a garantizar la formación integral del venezolan@ con el perfil que demanda una nación en transformación y cambios profundos de la estructura republicana con miras al desarrollo sustentable, armónico y participativo de tod@s y cada uno de sus habitantes. Estos cambios están obligando a redimensionar la Educación Bolivariana Venezolana, propuesta que se traduce en el Diseño Curricular. Además, en virtud de los avances científicos y tecnológicos, se acelera el reimpulso en el campo educativo, desde la perspectiva holística y tomando en consideración el entorno social, político, económico y cultural en el cual interactúa de manera efectiva y productiva.

La Educación tiene como misión promover el desarrollo integral de la persona y, por ende, de las sociedades, de manera que cada quien pueda asumir responsablemente la construcción de un proyecto de vida a fin de contribuir efectivamente en la transformación de la realidad social, en un mundo caracterizado por la globalización, los avances de la ciencia y el profundo impacto de las TICs. Cabe recordar, que el principal objetivo de la Educación es formar un hombre capaz de vivir plenamente disfrutar y crear, trascender el aquí y el ahora, no es posible educarlo en y para la repetición, se requiere auspiciar su actividad independiente crítica y creativa. Se necesita por tanto desarrollar su pensamiento, sus sentimientos y valores, su actuación ética transformadora así como propiciar el desarrollo de la autonomía personal (moral e intelectual) haciendo uso de los de los recursos que caracterizan el momento histórico social.

En consecuencia, en lo concerniente a la formación del sujeto pedagógico, se requiere la construcción del discurso pedagógico, una noción de educación más crítica. Se trata de decodificar las prácticas educativas hasta ahora dominantes, independientemente de las ideologías imperantes, decodificar el lenguaje de los grandes textos academicistas y confrontar al estudiante con lo que sería la construcción de nuevos significados, estructurados por la cultura en la experiencia, de la propia subjetividad y el respeto a la alteridad en su relación con otros. Se trata de un nuevo humanismo constructivo y transformador.

Desde este ángulo, el Currículo Bolivariano como núcleo de la misión y de las demandas socioeducativas de la escuela, no debe limitarse a una simple implantación de modelo pedagógicos teóricos, sino favorecer entre los diferentes actores del proceso educativo una construcción colectiva desde una perspectiva intersubjetiva, nuevas formas de producir conocimientos, comunicarse, organizarse y trabajar colaborativamente, para transformar el entorno educativo y que esto produzca cambios profundos en la forma de vida en las comunidades.

Probablemente el mayor desafió estará en formar el ser social en contexto de la pedagogía del sentimiento para que se apropie de los avances tecnológicos y científicos, así como de los elementos correspondientes a su cultura local, regional, nacional e internacional, en forma reflexiva, con criterio enriquecedor y transformador beneficie productivamente a su comunidad y el país. Estamos, entonces, llamados a participar de la constitución delo Suijeto Histórico y de la nueva REPÚBLICA.



Referencias:

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Cararacas: Gaceta Oficial Nº 36860

Doise, W (1991). Identidad, conversión e influencia social.En: La influencia social inconsciente. Estudios de psicologia social experimental. Edición de Sergio Moscovisic, Gabriel Mugny y Juan Antonio Pérez. Barcelona Antrhopos.

MPPE. (2007). Currículo Nacional Bolivariano. Cenamec. Caracas

Morín, E. (2000). Los sietes saberes necesarios en la educación del siglo XXI. Editado por IESALC y CIPOST conjuntamente con la UNESCO

Inostroza, C. Formando Educadores Integrales para el siglo XXI. Congreso de Asovac. Postgrado de Lectura ULA:

Maturana, H 1996. El sentido de lo humano. Santiago de Chile. Dolmen.


http://maestriarobinsoniana.unesr.edu.ve/moodle/mod/resource/view.php?id=2264

http://maestriarobinsoniana.unesr.edu.ve/moodle/mod/resource/view.php?id=2257
http://maestriarobinsoniana.unesr.edu.ve/moodle/file.php/54/unidadII/

No hay comentarios: